
Un fondo de inversión es, en esencia, un producto financiero que usted adquiere —o si lo prefiere, un servicio. Aunque invertir de forma ordenada y razonable no requiere grandes conocimientos, muchas personas prefieren delegar esa tarea. Para ello, invierten a través de fondos gestionados.
Un fondo de inversión no es más que una cartera de acciones —o de otros activos, aunque aquí nos centraremos en los fondos de renta variable— que un gestor, normalmente vinculado a un banco, reúne en una cuenta común. A partir de ahí, se venden participaciones de ese fondo a los clientes, quienes así pueden invertir en diversas empresas con una buena diversificación y sin tener que llevar ningún tipo de control.
Cuando el cliente vende sus participaciones y ha obtenido beneficios, simplemente declara las ganancias a Hacienda. No hay papeleos, ni cuentas de bróker, ni cálculos de dividendos o precios de compra y venta: es una forma muy cómoda de gestionar el dinero.
Pero esa comodidad tiene un precio. En esta sección, mi intención es arrojar algo de luz sobre ese coste, porque muchas personas —de hecho, una gran mayoría— desconocen cuánto están pagando realmente por esa gestión.
Los fondos de inversión pueden clasificarse de muchas formas. Algunos son generales, mientras que otros se centran en un país, en un sector concreto o en empresas con alto dividendo. Existen fondos de casi cualquier tipo imaginable.
También se diferencian según su propósito: algunos buscan simplemente superar discretamente a un índice de referencia, mediante una gestión moderada, con ajustes puntuales en la cartera y sin asumir grandes riesgos. Otros, en cambio, aplican una gestión muy activa, en la que los gestores utilizan sus conocimientos de inversión para comprar y vender acciones con mayor frecuencia, asumiendo más riesgo con el objetivo de obtener mayores rentabilidades.
Existen fondos genéricos, comercializados por los propios bancos y gestionados por equipos internos, que podríamos considerar como fondos de «marca blanca». Frente a ellos, están los fondos de «autor» o de «marca», gestionados por inversores reconocidos que han ganado prestigio gracias a rentabilidades destacadas en el pasado, superando ampliamente al mercado con su gestión.
Los fondos más simples reciben un nombre especial: se llaman ETFs, del inglés Exchange Traded Funds, que en español suele traducirse como «fondos cotizados», aunque en la práctica todo el mundo los llama simplemente ETFs.
Un ETF tiene como objetivo principal replicar el comportamiento de un índice o de un sector concreto. Para lograrlo, el gestor crea el fondo comprando exactamente las mismas acciones que componen ese índice, en la misma proporción. Así, si una empresa representa el 5 % del índice, representará también el 5 % del fondo.
El fondo se divide en participaciones que cotizan en bolsa, por lo que cualquier inversor puede comprar fácilmente el conjunto del índice simplemente adquiriendo participaciones del ETF. Es como si comprara todas las acciones del índice, pero en una sola operación y en la proporción exacta del mercado.
Además, como las participaciones del ETF cotizan en tiempo real, el inversor puede venderlas en cualquier momento, igual que si fueran acciones. El valor de las participaciones replica con gran precisión la evolución del índice que sigue.
La gestión de un ETF es mínima: el gestor no toma decisiones activas de inversión. Su único trabajo es ajustar la cartera cuando cambia la composición del índice, sustituyendo las acciones que salen por las que entran, siempre manteniendo las proporciones exactas para garantizar una réplica fiel del mercado, pero en pequeño.
Como es fácil de entender, los ETFs tienen el coste más bajo entre todos los tipos de fondos, ya que prácticamente no requieren gestión activa. El gestor incurre en muy pocos gastos: se necesita poco personal, se dedica poco tiempo, y apenas hay comisiones por compra y venta de acciones en el mercado.
El coste principal de un fondo de inversión es lo que se conoce como «comisión de gestión». Además, algunos fondos pueden aplicar otras comisiones, como la de suscripción (al entrar) o la de reembolso (al salir), aunque no siempre están presentes.
La comisión de gestión es el importe que usted paga anualmente por la administración y supervisión de los activos del fondo, y se calcula siempre como un porcentaje del capital gestionado. Por ejemplo, una comisión del 1 % anual —muy habitual— implica que, si usted invierte 100.000 euros, pagará 1.000 euros al año en concepto de gestión.
Este coste no se cobra de una sola vez, sino que se aplica de forma proporcional a lo largo del tiempo, según el periodo durante el cual se mantiene la inversión. Si, por ejemplo, usted mantiene el dinero invertido sólo cuatro meses, pagará únicamente la parte correspondiente a ese periodo. En la práctica, los fondos descuentan esta comisión de forma progresiva —normalmente semana a semana o mes a mes— directamente del patrimonio del fondo, reduciendo el valor liquidativo de las participaciones sin necesidad de emitir cargos explícitos.
En esta tabla he incluido algunos de los fondos más grandes que he encontrado de bolsa española. vamos a comentar algunos de ellos:
Fondo de Inversión | Costo total anual | Rentabilidad Anualizada |
---|---|---|
Bindex España Índice FI | 0,37 % | 5,75 % (2018 - 2024) |
CaixaBank Bolsa España 150 FI | 1,15 % | 5,52 % (2018 - 2024) |
Occidente Bolsa Española FI | 2,30 % | 3,84 % (2018 - 2024) |
Fidelity Iberia Fund A-Acc-EUR | 1,94 % | 5,01 % (2018 - 2024) |
Mutuafondo España FI | 1,45 % | 6,19 % (2018 - 2024) |
Cartesio X FI | 0,63 % | 2,81 % (2018 - 2024) |
Magallanes Iberian Equity FI | 0,55 % | 5,24 % (2018 - 2024) |
Bestinver Bolsa FI | 1,85 % | 3,83 % (2018 - 2024) |
Cobas Iberia FI | 1,55 % | 3,13 % (2018 - 2024) |
Sabadell España Bolsa Futuro FI | 2,21 % | 1,74 % (2018 - 2024) |
La rentabilidad media anualizada del IBEX 35 Total Return entre el 1 de enero de 2018 y el 31 de diciembre de 2024 es aproximadamente del 6,4 % anual. Esta cifra refleja el rendimiento compuesto anual del índice durante ese periodo, incluyendo la reinversión de dividendos. Este rendimiento supera al de muchos fondos de inversión activos en el mismo periodo, incluso antes de considerar las comisiones que estos fondos puedan cobrar. De entre los fondos de la lista anterior valorados entre 2018 y 2024 sólo Mutuafondo España FI se acerca el rendimiento del índice, quedando cerca pero por detrás.
Bindex España Índice FI
El primero de los fondos es Bindex España Índice FI, de BBVA Asset Management. Esta es la descripción del fondo que hace la gestora:
El objetivo de gestión consiste en replicar el índice IBEX 35® en su modalidad Total Return (recoge la rentabilidad por dividendos después de impuestos). pudiendo para ello superar los límites generales de diversificación. El fondo podrá superar los límites generales de diversificación. Se podrá superar el límite del 20% de exposición a un solo emisor hasta el 35%, si la ponderación de dicho emisor en el índice supera el 20%. La rentabilidad del fondo y del índice puede no ser similar pues por el lado negativo el fondo soporta comisiones y gastos adicionales. Se invertirá, directa o indirectamente, en torno al 100% de la exposición total en valores del Índice IBEX 35® y derivados sobre dicho índice o sus componentes.
En resumen, este fondo de inversión tiene como objetivo replicar el comportamiento del índice IBEX 35 con dividendos incluidos (también llamado «total return»). El propio fondo advierte de que pueden existir ligeras desviaciones respecto al índice, y que la rentabilidad final podría ser algo inferior debido a las comisiones de gestión.
En la práctica, este fondo funciona de forma muy similar a un ETF que siga al IBEX 35: la principal diferencia es que los ETF cotizan en bolsa y pueden comprarse o venderse en cualquier momento del día, mientras que este fondo no cotiza y sólo permite operaciones al cierre de cada jornada. No obstante, el enfoque de ambos productos es esencialmente el mismo.
Entre el 1 de enero de 2018 y el 31 de diciembre de 2024, la rentabilidad del fondo Bindex España Índice FI fue del 47,9 % (5,75% anual). Por otra parte. En el mismo periodo el índice IBEX 35 Total Return experimentó una revalorización del 54,4% (6,4% anual). La diferencia por tanto entre la revalorización del fondo y la revalorización del índice Ibex35 Total return es del 6,5% en 7 años. Para una inversión de 100000 euros esto habría supuesto una diferencia de 6500 euros.
La pregunta natural es: ¿podría usted haberse ahorrado esa cantidad, o al menos una parte significativa? No sé cómo lo ve usted, pero para mí, 6500 euros es mucho dinero. Incluso la mitad lo es, y también lo sería la cuarta parte.
Para replicar el comportamiento del índice IBEX 35 Total Return, basta con comprar las acciones que lo componen respetando la proporción que representa cada empresa según su capitalización bursátil.
En la siguiente tabla se muestran las empresas del IBEX 35 con su capitalización en miles de millones, el porcentaje que representa sobre el total del índice y la cantidad que habría que invertir —de una hipotética inversión de 100.000 euros— en cada una de ellas para reproducir fielmente la distribución del índice. Datos de mayo de 2025.
Empresa | Capitalización (M€) | % del IBEX 35 | Inversión por 100000 € | % acumulado |
---|---|---|---|---|
Inditex | 110,000 | 14.11% | 14110 € | 14.11% |
Iberdrola | 95,000 | 12.19% | 12190 € | 26.3% |
Santander | 90,000 | 11.55% | 11550 € | 37.85% |
BBVA | 80,000 | 10.26% | 10260 € | 48.11% |
Cellnex | 45,000 | 5.77% | 5770 € | 53.88% |
Amadeus | 40,000 | 5.13% | 5130 € | 59.01% |
CaixaBank | 35,000 | 4.49% | 4490 € | 63.5% |
Repsol | 30,000 | 3.85% | 3850 € | 67.35% |
Endesa | 25,000 | 3.21% | 3210 € | 70.56% |
Ferrovial | 22,000 | 2.82% | 2820 € | 73.38% |
Aena | 20,000 | 2.57% | 2570 € | 75.95% |
ACS | 18,000 | 2.31% | 2310 € | 78.26% |
Grifols | 16,000 | 2.05% | 2050 € | 80.31% |
Bankinter | 15,000 | 1.92% | 1920 € | 82.23% |
Mapfre | 14,000 | 1.8% | 1800 € | 84.03% |
Telefónica | 13,000 | 1.67% | 1670 € | 85.7% |
ArcelorMittal | 12,000 | 1.54% | 1540 € | 87.24% |
Acciona | 11,000 | 1.41% | 1410 € | 88.65% |
Merlin Properties | 10,000 | 1.28% | 1280 € | 89.93% |
Solaria | 9,000 | 1.15% | 1150 € | 91.08% |
Enagás | 8,000 | 1.03% | 1030 € | 92.11% |
Redeia | 7,500 | 0.96% | 960 € | 93.07% |
Rovi | 7,000 | 0.9% | 900 € | 93.97% |
Indra | 6,500 | 0.83% | 830 € | 94.8% |
Acciona Energía | 6,000 | 0.77% | 770 € | 95.57% |
Colonial | 5,500 | 0.71% | 710 € | 96.28% |
Logista | 5,000 | 0.64% | 640 € | 96.92% |
Unicaja | 4,500 | 0.58% | 580 € | 97.5% |
Sacyr | 4,000 | 0.51% | 510 € | 98.01% |
Puig | 3,500 | 0.45% | 450 € | 98.46% |
PharmaMar | 3,000 | 0.38% | 380 € | 98.84% |
Melia Hotels | 2,500 | 0.32% | 320 € | 99.16% |
IAG | 2,000 | 0.26% | 260 € | 99.42% |
Acerinox | 1,800 | 0.23% | 230 € | 99.65% |
Banco Sabadell | 1,500 | 0.19% | 190 € | 99.84% |
Fluidra | 1,200 | 0.15% | 150 € | 100% |
Replicar el índice por su cuenta implica asumir ciertos costes, como comisiones de compra y venta, custodia anual y la Tasa Tobin, pero incluso sumando todos ellos, el ahorro respecto a un fondo de inversión puede ser muy importante. Para lograrlo, bastaría con comprar las acciones según los porcentajes de capitalización indicados, mantenerlas durante cinco años y reinvertir cada año los dividendos respetando esas mismas proporciones.
En esta tabla presento los cálculos, redondeando siempre los gastos por exceso para no entrar en detalles que harían el análisis innecesariamente largo y tedioso para la mayoría de los lectores. Se parte de la hipótesis de que la inversión se realiza a través del bróker de Bankinter, el más económico entre los grandes bancos.
Concepto | Cálculo y explicación |
---|---|
Comisiones de compra y venta | 22 operaciones × 8 € + 13 operaciones × 3,95 € (compra inicial) + 4 años × 35 × 3,95 € (reinversiones anuales) + 35 x 8 € (venta final aproximada por exceso) = 1.060,35 € |
Custodia anual | Valor medio estimado de la cartera: (100.000 € + 154400 €) / 2 = 127.200 € 5 años × 0,16 % × 127200 € = 1.017,60 € |
Tasa Tobin | 0,2 % sobre valor medio estimado de la cartera (también estimado en exceso): 0,002 × 127.200 € = 254,40 € |
Total gastos estimados | 1060,35 € + 1.017,60 € + 254,40 € = 2.332,35 € |
Valor no ganado por invertir en fondo | Diferencia entre replicar el índice o comprar el fondo: 6.500 € |
Ahorro neto gestionando usted mismo | 6.500 € − 2.804.65,10 € = 4.167,65 € |
¿Estaría usted dispuesto a encargarse personalmente de esta gestión a cambio de obtener 4.167,65 € más al cabo de 7 años? Y eso con una inversión de sólo 100.000 €. Imagine el ahorro potencial si invirtiera 200.000, 300.000 €, o incluso más. Además, tenga en cuenta que podría realizar la inversión a través de un bróker de muy bajo coste, lo que incrementaría aún más el ahorro final.
Evidentemente, si la cantidad a invertir es mucho menor, los números cambian. Aunque en la mayoría de los casos sigue siendo más rentable gestionar la inversión por su cuenta —y sólo deja de serlo cuando se trata de cantidades realmente pequeñas—, es posible que, para importes reducidos, el esfuerzo no compense.
Por ejemplo, si va a invertir 10.000 €, el ahorro potencial aproximado sería de unos 416,76 €, una cantidad que quizá no justifique el tiempo y la dedicación necesarios para replicar el índice por su cuenta.
Occidente Bolsa Española FI
Occidente Bolsa Española FI, gestionado por Gesiuris Asset Management, es el fondo con las comisiones más elevadas de toda la tabla: nada menos que un 2,30 % anual. Esto implica que, por cada 100.000 € invertidos, el coste anual asciende a 2.300 €. En cinco años, el total pagado sería de 11.500 €, y en diez años alcanzaría los 23.000 €. Además, esta cifra se incrementaría aún más si el valor de la inversión crece con el tiempo, como es previsible.
La rentabilidad promedio anual compuesta del fondo Occidente Bolsa Española FI entre 2018 y 2024 ha sido aproximadamente del 3,84 % anual. (Puede comprobarlo usted mismo utilizando una calculadora y los datos públicos disponibles en la web del fondo: es un cálculo sencillo si ha leído con atención este sitio web). Por ejemplo, si usted hubiera invertido 100.000 € el 1 de enero de 2018, al cierre de 2024 su inversión habría alcanzado un valor liquidativo de 130.182,54 €, lo que representa una ganancia total del 30,18 % en siete años.
El cliente despistado podría pensar que se trata de una buena rentabilidad, teniendo en cuenta lo poco que ofrecen los depósitos, 30,18% en 7 años es una buena mejora, y podría darse por satisfecho.
Sin embargo, durante el mismo periodo, el índice IBEX 35 Total Return se revalorizó un 54,4 %, lo que equivale a una rentabilidad anual media del 6,4 %. Si usted hubiera replicado este índice por su cuenta —comprando directamente las acciones del IBEX 35 en la proporción correspondiente y reinvirtiendo los dividendos tal como explicamos anteriormente—, su inversión inicial de 100.000 € habría crecido hasta alcanzar los 154.400 € al finalizar 2024.
Descontando los gastos estimados de gestión propia (unos 2.332,35 €), el resultado neto habría sido de 152.067,65 €. En comparación, esto supone 21.885,65 € más de lo que habría obtenido invirtiendo a través del fondo. Es decir, el fondo se ha quedado muy por detrás de lo que habría sido simplemente replicar el comportamiento del mercado.
Con unos costes tan elevados, cabría esperar de este fondo de inversión una gestión verdaderamente sobresaliente: llevada a cabo por expertos, con estrategias diferenciadoras, control eficaz del riesgo y un rendimiento que superara de forma consistente al mercado. Como mínimo, debería batir la inflación, compensar los impuestos y ofrecer una rentabilidad adicional de 2 o 3 puntos porcentuales sobre el capital invertido.
Sin embargo, nada de esto ha ocurrido. Los resultados han sido mediocres y los costes, completamente desproporcionados. Los gestores del fondo han hecho negocio cobrando comisiones elevadas, mientras usted —el inversor— no ha ganado absolutamente nada y ha perdido la oportunidad de obtener mucho más simplemente replicando al mercado.
Encontrar un fondo de inversión centrado en empresas del IBEX 35 —o incluso en compañías europeas o estadounidenses— que, a pesar de sus elevadas comisiones, consiga batir al mercado de forma consistente, es extremadamente raro. La mayoría de los fondos de gestión activa no logran superar a su índice de referencia una vez descontados los costes. Y los pocos que lo consiguen en ciertos periodos suelen hacerlo asumiendo mayores riesgos o aplicando estrategias agresivas, como el uso de apalancamiento.
Entonces, ¿por qué tantos inversores siguen confiando su dinero a fondos como este? La respuesta es sencilla: falta de cultura financiera, desconocimiento de las alternativas, y confianza ciega en las recomendaciones del banco. Muchos clientes contratan estos productos porque se los ofrece su entidad financiera, sin comparar comisiones, sin consultar rentabilidades históricas, y sin tener referencias del índice con el que deberían contrastarlos.
En los foros de internet es fácil encontrar afirmaciones como «los fondos de inversión son una estafa». En realidad, no lo son. Para que exista una estafa debe haber engaño, y en este caso no lo hay: las comisiones están publicadas desde el principio, y la rentabilidad histórica es totalmente accesible. Si usted ve naranjas a 200 € el kilo y decide comprarlas, no se trata de una estafa, sino de un error de juicio: usted no conoce el valor de las cosas. Lo que falta aquí no es transparencia, sino educación financiera.
Es fundamental entender en qué estamos invirtiendo, qué costes asumimos y si el resultado justifica el precio pagado. No se trata de desconfiar de todos los fondos, sino de saber distinguir entre los que aportan valor y los que simplemente lo absorben.
Las comisiones elevadas reducen notablemente la rentabilidad a largo plazo, y en la mayoría de los casos, el rendimiento del fondo no compensa ese coste. Para muchos inversores —especialmente quienes buscan estabilidad y eficiencia— los fondos indexados de bajo coste suelen ser una opción más sensata. No obstante, la alternativa más eficiente sigue siendo gestionar la inversión directamente, comprando acciones.
Es posible que usted investigue y encuentre fondos que le parezcan atractivos; a mí, personalmente, ninguno me lo parece. Lo importante es hacer números antes de invertir, y entender bien qué se está comprando y cuánto se está pagando por ello.
Como ya indiqué en la presentación de esta web, no pretendo decirle en qué fondos debe invertir. Esta página no tiene ese objetivo, y además, no he realizado un análisis detallado porque no tengo intención de invertir en fondos.
Desde hace décadas estoy convencido de que la mejor forma de proteger e incrementar el patrimonio a largo plazo es invertir directamente en bolsa: comprar acciones, obtener ingresos periódicos si se necesitan, o reinvertir los dividendos para aprovechar el efecto del interés compuesto.
Si usted elige invertir a través de fondos, hágalo solo por comodidad. Pero tenga claro que esa comodidad tiene un precio: comisiones, menor rentabilidad y menos control sobre su inversión.
